..."de una pendeja de 18 a su papel".

Lunes. 02/09/19. Automáticamente se me llenan los ojos de lágrimas por sentir, una vez más, que el papel, es mi única escucha; el que no juzga, y se banca mis vomitadas asquerosas de amor, de una pendeja de 18 a su papel, a su diario, a su confesor número 1.
Escribo desde que tengo memoria. Amo escribir. Amo definir con minuciosas palabras lo que siento, lo que me pasa; y ojo, que no solo confieso mis alegrías, sino también, cada vez que un gil me rompió el corazón.
Mil cosas por hacer de la facultad, pero prefiero, escribirle a "esto" (sí, ésto. la computadora y yo) , que algún día, supongo leer y despanzarme de la risa como lo vengo haciendo con cada blog anterior, sentándome a escribir con 15 años y tomando un mojito, "aprovechando la inspiración"; como diría la vieja Lu, aquella piba de 2016.

No sé por donde empezar, no me cabe el destino pero tampoco el pasado. Porque una vez más, no sé lo que quiero, y no saberlo, me hace dar vuelta el bocho 24/7.
Quizás solo se trata de sentarse a esperar... y que ocurra lo que tenga que ocurrir; así parece mas fácil... peeeeeeeeeero, como siempre fuí terca y vueltera, yo tengo que ir en busca de las cosas; porque puedo ser lo que quieras, pero primero, Taurina.

La vida me sorprende cada día, es tan rancia a veces, que me da arcadas.
La gente también me sorprende, a veces para bien y otras... mejor ni hablar.
El amor... y ¿qué decir?; ya sé: cada uno hace lo que puede... y yo también.